Unas horas jugare a quererte,
19 de octubre de 2010
Escondidos, amarrados, desconcertantes, sorprendentes, inusuales. Atados con una cuerda para que no se escapen.
Para que no se fuguen de la cárcel de mi piel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario